viernes, 26 de mayo de 2023

LA CLASE FUERA DEL AULA

Las clases de Lengua castellana y Literatura nunca terminan en el aula. Los alumnos se acercan, a veces, a los autores y las lecturas que se les proponen en el aula y ensanchan el campo de la materia. También participan en variadas actividades extraescolares como visitas al teatro o los medios de comunicación o realizan rutas literarias relacionadas con algunas de las obras clásicas que empiezan a conocer.

Esta semana los alumnos de 4º de ESO han participado en dos actividades que no son tan frecuentes, pero que han resultado sumamente enriquecedoras: un taller de teatro y una visita a una exposición. De ellas quiero hacer una pequeña reseña para que puedan servir de incentivo a otros profesores.

 

El taller de teatro corrió a cargo de Alfonso Plou, un hombre de teatro que ha desarrollado su trabajo en multitud de facetas. 

 

Es autor de más de treinta obras, entre las que destacan Goya, Buñuel, Lorca y Dalí, Picasso adora la Maar, Yo no soy un Andy Warhol, Lucha a muerte del zorro y el tigre o Los hermanos Machado. Ha recibido algunos de los más prestigiosos galardones del mundo teatral, como el Premio Marqués de Bradomín o el Premio Lázaro Carreter de Literatura Dramática.

Es miembro fundador de la compañía Teatro del Temple, con la que ha puesto en escena obras propias y adaptaciones de grandes obras de la literatura dramática universal como Edipo o La vida es sueño.

Es también productor de muchos espectáculos teatrales, imparte cursos de literatura dramática y es, además, gestor del Teatro de las Esquinas, un espacio cultural que ofrece una variada y rica programación.

 

A partir de las lecturas de dos piezas teatrales breves, «Heredera» de Alfonso Plou, y «¿Te ha gustado? de José Ignacio Tofé, los alumnos se acercaron al mundo de la literatura dramática e incluso discurrieron acerca de la puesta en escena teatral.

En las dos sesiones del taller los alumnos tuvieron la oportunidad de realizar una lectura dramatizada de las dos obras con Alfonso Plou, comentarlas y tratar de diferentes cuestiones relacionadas con el teatro y con las actividades realizadas por el autor y director. Para Alfonso Plou, el teatro es una manera de crear realidades paralelas, es una forma de crear ficción que se convierte en verdad. Para él, el teatro da valor a la vida, porque es capaz de crear vida, hace creer a la gente la vida que ha creado.

La actividad se realizó gracias al programa de promoción de lectura de la Asociación de Autores y Autoras de Teatro, «Encuentros con Autores en el Aula 2023». Los alumnos recibieron, además, un volumen de obras breves de autores teatrales contemporáneos, «El tamaño no importa» (número 12), enviado por la Asociación.

En definitiva, los alumnos asistieron a una estupenda clase práctica de teatro, impartida por uno de los autores más representativos del panorama actual.

 

La visita a la exposición «Ramón J. Sender. Memoria bisiesta» en el Museo de Zaragoza les permitió a los alumnos  acercarse a la vida y la obra de un autor que fue testigo del siglo XX. A partir de las explicaciones del profesor, la lectura de los carteles y la visión de fotografías y ejemplares de sus obras, los alumnos realizaron un cuestionario que repasaba la vida y obra de Sender.

 

Sender vivió la Guerra de Marruecos, experiencia a partir de la que escribió su novela pacifista Imán. En la Dictadura de Primo de Rivera estuvo encarcelado por oponerse al régimen. Durante los años de la Segunda República escribió literatura de denuncia, por ejemplo, en Viaje a la aldea del crimen, sobre la masacre de Casas Viejas, y novela histórica, como Mr. Witt en el cantón, situada en plena crisis cantonalista durante la Primera República, novela que recibió el Premio Nacional de Literatura.

El drama de la Guerra Civil, en la que perdió a su mujer y a su hermano, fusilados por el bando franquista, lo testimonió en Contraataque. Durante el exilio, que se prolongó durante más de cuarenta años, cultivó diferentes géneros: la novela histórica (La aventura equinoccial de Lope de Aguirre), la novela autobiográfica (Crónica del alba), la sátira (La tesis de Nancy) o el ensayo entremezclado con la autobiografía (Memorias bisiestas o Monte Odina). Réquiem por un campesino español, que recrea  el tema de la Guerra Civil, es la novela más célebre de esta época y por la que siempre será recordado.

La visita fue un complemento especial a la lectura obligatoria del tercer trimestre, Réquiem por un campesino español.

Estas actividades permiten a los alumnos conocer de otra forma aspectos relacionados con los autores y sus obras y resultan altamente motivadoras.

jueves, 4 de mayo de 2023

FÉLIX TEIRA, PREMIO DE LAS LETRAS ARAGONESAS

Quiero volver a felicitar desde esta entrada al compañero y amigo Félix Teira, que ayer recibió el Premio de las Letras Aragonesas. Esta merecida distinción le ha sido entregada por su trayectoria literaria en la que siempre ha mostrado su espíritu crítico, su sensibilidad social y su calidad literaria.

Ha sido un autor muy presente en las aulas en los últimos veinticinco años. Sus obras Saxo y rosas, ¿Y a ti aún te cuentan cuentos? y Una luz en el atardecer gozaron del aplauso de los jóvenes lectores que veían retratada su realidad cercana de una forma certera. Otras novelas más recientes, como Hijos y padres, de la que ya hablamos en el blog, también acompañaron a varias promociones de estudiantes que quedaron deslumbrados con las historias que leían y con las palabras del autor en diferentes coloquios entablados con él en los institutos.

Sirva como invitación a la lectura de Félix Teira el comienzo de una de sus últimas obras, la ciega.com, una obra que nos invita a reflexionar sobre nuestra sociedad y de la que el  novelista dijo que su protagonista estaba "tan desnortada como los tiempos que vivimos".


         —¿También te has dado de baja en el gimnasio? ¡Paranoicos! —exclamó Chon—. ¡Una movida retro, en plan jipis viejos!

         —Ya ves, le ha dado por las restricciones —Marga, apática, arqueó las cejas.

         —Muy propio, en la onda cavernaria de Ismael.

         Chon apoyó la nuca en el respaldo de la hamaca y se subió el vestido color berenjena. El sol de julio le doraba los muslos. Añadió:          —Tu marido se inventa un rollo anticuado y tú tragas. Los ingenieros y sus inventos. Con tu permiso, lo odio —colocó las manos sobre el vientre y cerró los ojos. Con dos horas de sol desaparecería el cerco de las gafas.

Lo odiaban y lo admiraban, pensó Marga. Ismael es un ejemplar interesante, va completamente a su bola. Así lo definió Irene al conocerlo en un restaurante vegetariano. Un año después, cuando ella volvió de Italia y comenzaron a salir, los amigos añadieron con mala baba: Ismael es un ingeniero rural con adornos cibernéticos.

         —No sé cómo no estás morena teniendo esta terraza —comentó Chon. Deslizó los tirantes por los hombros
y dejó al sol los pechos. Los pezones parecían montados sobre un cojinete de silicona, ¿se había hecho un tuneado discreto?

         —¿Cuándo has hablado con Ismael?

         Marga apoyaba la cadera en el murete de la terraza. Vigilaba a Sabina que jugaba con el canguro, un peluche gigante de color rata.

         Chon, con los ojos cerrados y un tono de fastidio, afirmó:

         —Ayer, Marga, ayer. ¿No te lo dijo?

         —No.

         —Me pasé el día haciendo gestiones para ver si le conseguía algo a tu retorcido marido. Intenté decírtelo por la noche, te llamé a las diez, ¿recuerdas?, pero estaba él. Tú, con Ismael a tu vera, estás rarita y borde por teléfono. Y tu móvil, apagado.

         Porque no tenía saldo, mierda, pensó Marga pero se calló. Chon usaba un tono didáctico, maternal. La lija raspaba el borde de las uñas. Desde que su marido había perdido el trabajo aparecía la buena voluntad. El regodeo en el tropiezo ajeno recubierto con nata solidaria.

         —Quieres decirme algo, Chon. No te andes con rodeos, suéltalo —la apremió Marga.

         —¡Joder, tía! —Chon se incorporó. Con una mano se recogía el pelo moreno en la nuca—. Ese tipo te formatea, te cambia. ¡A ver si vas a estar también borde conmigo! Sabina abrazó al canguro, que tenía su misma altura. Dos animalitos de peluche a punto de cumplir los tres años.

         —¡Has asustado al cangudo! —protestó Sabina.

         —¡Al canguro! ¡Uro! —dijo Marga.

         —¡Al cangudo, udo! ¡Indécil! —replicó la niña.

         —¡Imbécil! ¡Con be! —la corrigió su madre con aspereza.

         Sabina tomó al enorme animal del cuello y caminó hacia el salón.

         —¡Y tú, Chon, larga lo que sea de una vez!

         —Marga, bonita, vete a la mierda —respondió la otra
en tono bajo. Chon se había levantado y se colocaba los tirantes como si decidiera irse.

martes, 2 de mayo de 2023

PREMIO PARA "POESÍA PARA LLEVAR"

Desde esta entrada quiero dar mi enhorabuena a las coordinadoras del programa educativo "Poesía para llevar" por el Premio María Moliner a la Labor Docente Renovadora que les concedió hace ya unos días el instituto Avempace. Y como ellas quiero compartir con los lectores del  blog los dos poemas con los que cerraron el discurso de agradecimiento. El primero es de Wislawa Szymborska y el segundo de Pilar Benítez. Y seguro que nos abren la puerta a seguir leyendo y a seguir disfrutando la poesía, como centenares de chicos y chicas de Aragón que participan activamente, de la mano de sus profesores, en este estupendo programa.


 A ALGUNOS LES GUSTA LA POESÍA

A algunos,
es decir, no a todos.
Ni siquiera a los más, sino a los menos.
Sin contar las escuelas, donde es obligatoria,
y a los mismos poetas,
serán dos de cada mil personas.

 Les gusta,
como también les gusta la sopa de fideos,
como les gustan los cumplidos y el color azul,
como les gusta la vieja bufanda,
como les gusta salirse con la suya,
como les gusta acariciar al perro.
 

La poesía,
pero qué es la poesía.
Más de una insegura respuesta
se ha dado a esta pregunta.
Y yo no sé, y sigo sin saber, y a esto me aferro
como a un oportuno pasamanos.

 

[ESCRIBO]


 Escribo

pa que os suenios no s'aduerman.

Leigo

pa que as promesas rechiten.

Debuxo

pa que os deseyos no s'esbenten.

Tremolo

pa que os miedos se chumpen.

Dixo

o

silenzio

en

a

fuella

pa que otra begada Dafne se torne laurel.

 

[ESCRIBO]

Escribo / para que los sueños no se duerman. / Leo / para que las promesas renazcan. / Dibujo / para que los deseos no se evaporen. / Tiemblo / para que los miedos se columpien. / Dejo / el / silencio / en / la / hoja / para que otra vez Dafne se torne laurel.

[Traducción de la autora]