Con este poema de Mario Benedetti quiero desear feliz año 2023 a los lectores del blog, en defensa de la alegría frente a los catastrofistas, los intolerantes y los violentos.
DEFENSA DE LA ALEGRÍA
Defender la alegría como una
trinchera
defenderla del escándalo y la rutina
de la miseria y los miserables
de las ausencias transitorias
y las definitivas
defender la alegría como un principio
defenderla del pasmo y las pesadillas
de los neutrales y de los neutrones
de las dulces infamias
y los graves diagnósticos
defender la alegría como una bandera
defenderla del rayo y la melancolía
de los ingenuos y de los canallas
de la retórica y los paros cardiacos
de las endemias y las academias
defender la alegría como un destino
defenderla del fuego y de los bomberos
de los suicidas y los homicidas
de las vacaciones y del agobio
de la obligación de estar alegres
defender la alegría como una certeza
defenderla del óxido y la roña
de la famosa pátina del tiempo
del relente y del oportunismo
de los proxenetas de la risa
defender la alegría como un derecho
defenderla de dios y del invierno
de las mayúsculas y de la muerte
de los apellidos y las lástimas
del azar
y también de la alegría.
Hoy se cumplen veinte años de la muerte de José Hierro, uno de los poetas más importantes de la segunda mitad del siglo XX. Por ello os invito a leer y a escuchar el recitado de su poema «Vida», un soneto hecho a la manera barroca donde se repiten constantemente dos palabras. Este poema cierra a modo de epílogo Cuaderno de Nueva York, uno de los títulos fundamentales de nuestra poesía moderna, y está dedicado a su nieta Paula Romero. Es un ejemplo representativo de su poesía como testimonio del tiempo vivido. Sirva esta pequeña entrada también como un recuerdo del centenario del nacimiento del poeta que se conmemoró durante este año y como homenaje a Cuadernode Nueva York, que cumplirá dentro de pocos meses veinticinco años.
Erik le entregó la caja azul a su abuela. Al cogerla en
sus manos, su rostro cambio de expresión. Fue como si, de repente, su mente
hubiera viajado al pasado. La reconoció inmediatamente.
Ana Alcolea, Donde aprenden a volar las gaviotas
Después de haber leído Donde aprenden a volar las gaviotas, la novela de Ana Alcolea, los alumnos de 2º de ESO de nuestro instituto han escrito estos días «la historia de un objeto querido», una práctica más para su cuaderno de escritura creativa de este curso.
En esta novela la caja azul de la abuela Elsa tiene un protagonismo especial. Esto ha servido de trampolín para motivar esta práctica de escritura. El texto que han elaborado los alumnos, al igual que ocurre en la novela, gira en torno a un objeto apreciado y querido
por alguien de la familia (abuelos, padres, tíos,...) y que alberga además una
historia especial. Para ello han estructurado el texto en dos partes:
una descriptiva y otra narrativa. Esto les ha obligado a repasar todo lo estudiado y trabajado este trimestre acerca de los textos descriptivos y
narrativos.
En la descripción debían explicar con todo detalle el objeto elegido, cómo es, a quién pertenece, cuántos años de antigüedad
tiene, dónde está guardado, ... La descripción tenía que ser completa, para que el
lector se hiciera una idea exacta de cómo es el objeto.
En la narración tenían que contar la historia de ese
objeto: cómo y cuándo llegó a las manos del familiar, quién se lo regaló o
cómo lo consiguió, qué supone para él o ella guardarlo hoy en día, qué recuerdos le
trae, ... Podían acompañar el texto con alguna fotografía o dibujo del
objeto o con el testimonio directo del propietario del objeto.
Sin duda, los resultados han sido muy notables porque se han cocinado con muchos ingredientes: la lectura de la novela, la escritura creativa, la interacción con la familia, la implicación personal, el uso de las tecnologías de la información y la comunicación,...
De forma entusiasta nos sumamos este año nuevamente a la propuesta de #poema 27 del profesor Toni Solano para llenar las redes de poesías de los autores de la Generación del 27.
En anteriores ediciones de esta iniciativa poética estos fueron los poemas que elegí para compartir con los lectores del blog:
Hoy la propuesta es un conocidísimo poema de Rafael Alberti, «Galope». Pertenece a su poesía comprometida, la que compuso como «poeta en la calle» al servicio de la República en la Guerra Civil Española. Alberti exhorta a derrotar y a expulsar a los enemigos del pueblo, esto es, a los que se levantaron en armas contra el gobierno de la República. Las tres estrofas, la repetición tres veces del estribillo y las tríadas de palabras («las tierras, las tierras, las tierras»; «suenan, resuenan, resuenan»; «nadie, nadie, nadie») y estructuras crean un ritmo muy marcado que retumba cada vez más en el poema y ayuda a expresar ese sentimiento de deseo de victoria que simboliza el caballo, cabalgado por el pueblo. Como dicen Miguel Díez y Paz Díez, «pasadas aquellas circunstancias fatídicas de la historia española, el poema de Alberti sigue resonando con la misma vibración apasionada y rítmica, pero ahora -es lícito suponerlo- para proclamar la lucha sin cuartel contra tantos enemigos de toda época y ocasión, como son los hipócritas y los cínicos, los injustos y corruptos, los fanáticos y violentos, etc; en resumen, y como decía Machado, "esa mala gente que camina / y va apestando la tierra"». Leamos y escuchemos este poema y veremos su innegable vigencia en un mundo como el nuestro.
Acompaño el poema con tres versiones musicales del mismo, una ya clásica a cargo del magistral Paco Ibáñez (con el recitado del propio autor) y dos más actuales de dos grupos de rock, Niños mutantes y Sínkope, que nos vuelven a poner sobre aviso de que las palabras de este poema siguen muy presentes.